10 de Abril de 2020 | por: Silvana García Tironi | 2935 visitas
Gunther Plüschow nace el 8 de febrero de 1886 en Munich, Alemania. Entra a la Escuela Naval y termina su período de formación en 1912. Sin embargo, se va a querer dedicar a la aviación, por lo que luego va a ser nombrado piloto y mecánico de aviones.
Va a ser asignado como aviador militar y observador aéreo en Tsingtao, colonia alemana en China junto al río Amarillo.
Con el inicio de la Primera Guerra Mundial, los japones invaden China y toman posesión de Tsingtao. Plüschow logra escapar, viajando desde Shangai a Beijing, y de ahí a San Francisco, Los Ángeles y Nueva York, donde toma un buque con documentos falsos a Europa. Es descubierto por la policía irlandesa y es llevado preso a Inglaterra.
Al poco tiempo logra escapar y llega a Londres, donde toma un barco que lo deja en Holanda y al fin llega a Alemania.
Pero cuando llega a su país natal lo confunden con un espía y casi es fusilado.
Sin embargo, logra salvarse y sus cercanos lo animan a que escriba sus travesías de 9 meses para poder llegar a su país, la que tiene un gran éxito.
Con el fin de la guerra y la perdida de Alemania, Gunther se siente decepcionado de su patria y se retira de la Armada.
Comienza a trabajar el el área automotriz, arreglando autos, pero no se sentía feliz.
Por eso comienza a trabajar como capitán de buque, en el que paseaba a turistas por el Mediterráneo. Un amigo le ofrece un viaje a Sudamérica en buque como cronista y filmar la zona.
Parte en 1925 y llega al puerto de Valdivia, Chile. Va a conocer también parte de la Patagonia. Cuando vuelve a Alemania decide volver a Chile e inicia una recolecta de fondos para el viaje por la Patagonia y hacer una documentación audiovisual.
Inicia su viaje en octubre de 1927 en la gondoleta "Feuerland", Tierra del Fuego, a la Patagonia. Llega a Chile en noviembre de 1928 junto a su amigo y mecánico Ernst Dreblow. En Punta Arenas arma su hidroavión, que había sido enviada en un buque mercante.
Sobrevuela desde Punta Arenas hasta Ushuaia, y se convierte en el primer avión en llevar correspondencia postal de una ciudad a otra. Esto va a ser un gran aporte, ya que ambas ciudades se encontraban aisladas y era muy difícil su conexión.
Con este vuelo captura las primeras imágenes aéreas de Punta Arenas, Ushuaia y la cordillera de Darwin.
Para 1929, Plüschow vuelve a Alemania a mostrar su nuevo libro junto a la imágenes de la Patagonia, y así también recolectar un poco más de dinero para sus exploraciones. Edita una película y también traduce al español su libro.
A mediados de 1930 vuelve a Argentina, donde exhibe su película, pero sin el éxito que esperaba.
Luego, parte a Punta Arenas en donde había dejado su avión, que lo encuentra en pésimo estado. Lo va a reparar junto a Dreblow, pero el ala izquierda no quedó perfecta.
Reinicia sus vuelos, pero al saber que el avión no estaba en condiciones optimas para volar y con miedo de que en Chile le quitaran el permiso de vuelo, cruza la cordillera y explora parte de la Patagonia argentina, sobrevolando la región de los Hielos Continentales, Perito Moreno y el lago Viedma.
El 25 de enero de 1931, debido a una fuerte corriente de aire, deben descender bruscamente sobre unos glaciares.
Durante días, Plüschow y Dreblow intentan arreglar el avión, pero no podían encontrar la falla exacta que estaba en el ala izquierda del hidroavión.
Su último registro escrito en su diario de viaje fue el día 28 de enero del mismo año , donde escribe que van a hacer un último intento para poder salir. Sin embargo, el avión termina desplomándose en el lago Rico, a 70 km de Calafate en Argentina, acabando con las vidas de Plüschow y Dreblow.
Hoy existen, tanto en Chile como Argentina, monolitos en conmemoración al trabajo visual que logró Plüschow, dando a conocer la Patagonia desde otro ángulo, lo que también le llegó a costar la vida.