subido: 20 de Abril de 2017
Fotografía tomada en la Alameda, frente a la antigua Iglesia San Francisco en Abril de 1928. De fondo, sobresale la demolida Iglesia de San Juan de Dios.
Cercanos al fin de la concesión del sistema de Tranvías, en 1892 se comienzan a realizar estudios para electrificar el servicio de tranvías. Para este fin, Santiago Santiago Ossa comienza con proyectos para utilizar las aguas del canal del Maipo en la producción de la electricidad, necesaria para mover los tranvías. En 1896 un año antes de expirar la concesión, la municipalidad de Santiago llamo a concurso para modernizar el antiguo sistema de tranvías.
Luego del llamado se presentaron 4 empresas, entre ellas la firma Parrish, quien se adjudicó la licitación, la cual ya ese mismo año comenzó a proporcionar alumbrado público a la ciudad, formándose la Chilean Electric Tramway and Light Company (Compañía Chilena de Luz Eléctrica y Tranvías).
Aunque la empresa tenía su gerencia en Londres, el ingeniero español Henry Val se encargo del proyecto, iniciando sus obras el 9 de octubre de 1897. Casi cuatro años más tarde, el 2 de septiembre de 1900 a las 2:30 pm el primer tranvía eléctrico de Santiago comenzó su marcha desde el corazón del sistema la central de fuerza ubicada en Avenida Brasil con Avenida Mapocho.
Con este nuevo plus la red de la Chilean Electric Tramway and Light Company comenzó a crecer rápidamente llagando a cubrir casi la total de la ciudad de Santiago de principios de siglo.
El año 1918, los trabajadores tranviarios organizaron una de las primeras huelgas por demandas salariales en la ciudad, como medida estacionaron los carros sin permitir el tránsito y se colocaron a gritar consignas alusivas a sus demandas.
Hacia 1919, aparecen en Santiago quien en el futuro se convertiría en el verdugo de este sistema, el microbus, aunque en ese momento por su primitivo diseño y su capacidad de transporte no fueron un gran peligro.
En 1921, la Chilean Electric Tramway and Light Company y la Compañía Nacional de Fuerza Eléctrica se unen para formar Chilectra.
Hacia 1925, Chilectra comenzó a renovar parte de su material, eliminando las imperiales, e integrando tecnología de punta para la época como timbres eléctricos y sistemas automáticos para abrir y cerrar las puertas.
En mayo de 1941 se produce la última gran huelga masiva de trabajadores tranviarios lo que produce un gran caos en la ciudad, es así como el Gobierno liderado por Pedro Aguirre Cerda, decide intervenir la empresa nombrado una administración provisoria.
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